
El óleo es uno de los procedimientos pictóricos más extendidos, el preferido por los grandes maestros de la historia. Quizás sea éste uno de los motivos por el que mucha gente, deseosa de iniciarse en la práctica del arte, elige este medio como campo de pruebas.
El empleo de mezclas de aceites en la pintura doméstica y decorativa data probablemente de la Antigüedad, aunque la expresión «técnica al óleo» se emplea sobre todo para denominar los procedimientos empleados en Europa a partir del final de la Edad Media, donde, desde entonces, se ha convertido en el símbolo de la pintura de los tiempos modernos. En pocas décadas, dichas técnicas fueron tomando el relevo de las pinturas a la témpera, trayendo consigo la aparición de un nuevo soporte, el lienzo, que venía a sustituir a las tablas de madera preparada que se habían utilizado hasta entonces.

Con ellos, esta técnica llega a costas asombrosas y gracias a ella estos artistas consiguieron una sutileza y una variedad ilimitadas de efectos en sus pinturas. Además el óleo es la técnica que presta menos diferencias entre los colores frescos y secos, por lo que es la más indicada para las representaciones del natural en que todo depende de la apreciación justa de los tonos.

El ajuste de los tonos, junto a la facilidad de aplicación y al hecho de que ningún otro material proporciona tanta multiplicidad de modos de representación, es la razón por la cual la pintura al óleo prácticamente ha anulado a todas sus rivales, aunque las pinturas acríclicas puedan presentar a finales de siglo XX una fuerte competencia.
Sin embargo, durante el siglo XIX, también aparecieron grupos obsecionados por la pureza del color que sale fresco del tubo, a lo cual no se resistieron los fauvistas, gustosos de los sentimientos desbocados, menos preocupados por ajustar los tonos, ávidos de crear vibraciones ópticas sobre la superficie pictórica y de construir las masas de color con gruesos empastes. Esto es lógico en la medida en que la pintura al óleo ha llevado al artista a descubrir en la propia materia una verdad pictórica enriquecida.
A pesar de que el artista novel puede sentirse un poco intimidado por la extensa historia de la pintura al óleo y el alto grado de técnica alcanzado en los cuadros más conocidos, el óleo es, en realidad, un medio ideal para el principiante. Su flexibilidad y aparente facilidad de aplicación, que proporciona efectos rápidos e inmediatos, así como la opacidad y características del material, son algunas de las causas de que la pintura al óleo se haya convertido en la técnica de empleo más extendida.
De los materiales y marcas de pintura al óleo...

¡Pues bien, Manos a la Obra! ¿Pero cómo comenzar? ¿Qué debo tener a mano? ¿Con qué debo pertrecharme para iniciar este viaje de pintor? ¿Debo comprar materiales de buena calidad aún siendo un aficionado?... Pues la última pregunta resulta interesante de contestar: en Arte, de la calidad de los materiales, muchas veces, dependerá la calidad de la obra, ¡ojo! dije "muchas veces", pues, he visto obras de arte exquisitas realizadas apenas con un trozito de grafito o carboncillo, con témperas escolares, con óleos de baja pigmentación... etc. pero, sobre todo en el último caso, siempre termina uno diciendo " Qué buena está esta obra, lástima que no vaya a durar mucho" y ese comentario se acuña por supuesto: a los materiales, los soportes y los pigmentos de baja caliad tienden a amarillar con el tiempo... y cuando una obra es "buena" lo ideal es que se preserve "para siempre" de manera que pueda ser admirada por muchos. De modo que, siguiendo este orden de ideas, la respuesta resulta obvia: siempre será recomendable comprar materiales de muy buena calidad si queremos que nuestros trabajos perduren, sin embargo, cuando se empieza, quizás podamos decir, no es necesario porque apenas son "ejercicios" y tendrán muy poco valor artístico... pues ¡¡está bien!! !Quizás! Pero ello no le restará nunca el valor sentimental que nosotros le pongamos a estos esbozos, a estos "pininos" de nuestro arte, ¡no saben cómo he lamentado el ver amarillentas las primeras acuarelas que realicé! Los "ejercicios" que hacemos cuando somos aficionados tienen una vital importancia porque nos develan cuanto hemos progresado y ¡Qué felicidad es ver nuestros esfuerzos florecer! Por tanto os aconsejo siempre materiales de muy buena calidad aún para comenzar este viaje.
Aquí les dejo algunas de mis marcas favoritas y más recomendables, en cuanto a pintura al óleo se refiere.
Winsor & Newton



Aquí les dejo este fabuloso libro editado por la W&N sobre el óleo

Grumbacher

Talens
¿Qué otra marca recomiedo? Pues todas aquellas que se producen bajo el sello de Talens, el cual se ha especializado muchísimo en pinturas al óleo y ofrece al mercado incluso tres categorías de productos pues tratan de cubrir todos los gustos, exigencias y presupuestos tanto para artistas consagrados, profesionales y aficionados... Pero aquí voy a dejar que sea el mismo sello que nos explique las características y lo novedoso de sus productos.
Talens dispone de tres tipo de pintura al óleo:
Rembrandt
Esta pintura es muy apreciada por el pintor artístico profesional y por el aficionado exigente. Como base utilizamos exclusivamente los mejores pigmentos. El claro y puro aceite de linaza forma el aglutinante (para los colores claros, aceite de alazor). La pintura se muele lo más finamente posible. La gama consta de una amplia selección de más de 100 colores, entre ellos algunos especiales, como los transparentes óxidos de hierro y los duraderos colores de cadmio y cobalto. Los colores están divididos en cinco series de diferentes precios.
Van Gogh

Ámsterdam
Esta pintura ha sido prevista en primera instancia para proyectos de grandes superficies y para estudios que más tarde pueden terminarse con Óleos Rembrandt o Van Gogh. De ahí sus generosos envases, como son los botes de 500ml y tubos de 200ml. La gama se reduce a 28 colores con un grado de finura todavía excelente. Todos los colores tienen el mismo precio.
Pinceles: Pues como es de pensarse los otros grandes protagonistas para la pintura al óleo ha de ser los pinceles, pues, es con ellos que podemos aplicar la pintura en el soporte que utilicemos ya sea lienzo, papel o madera que son los más tradicionales para pintar al óleo, existen muchos tipos y gamas de pinceles para pintar al óleo, los más recomendables son los de cerda más o menos dura y de mangos suficientemente alargados y ergonómicos para que se cumpla satisfactoriamente su función, hay diversos tipos o géneros de pinceles al óleo, está el pincel cuadrado o plano usado para trabajar con colores pastosos y superficies lisas y colores diluidos, el pincel redondo o el llamado "lengua de gato" usado generalmente para detalles y donde haya figuras angulosas, como también para el "arrastre" o dejar "huellas de pintura", asimismo, tenemos diversos números de ellos desde la brocha para aplicar barniz y el número doce para grandes zonas hasta el diminuto 2 y 1,5 que son pinceles pensados para detalles diminutos y para escribir. Existen aún muchos más que pueden considerarse "especiales", sin embargo son estos los considerados tradicionales.
Talens, evidentemente, exige a toda la pintura al óleo altos niveles de resistencia a la luz. Por eso, en todos los tipos de pintura al óleo se usan exclusivamente pigmentos que poseen, en su mayor parte, el grado más elevado de resistencia a la luz.
Existen otras marcas excelentes que entran en la competitividad de éstas, sin embargo, se sabe que cada marca se inclina por la especialización en un producto específico como por ejemplo la Sennelier y Girault en los pasteles, la Derwent en todos los productos de arte llamado de "técnicas secas" y así sucesivamente, en mi franca opinión, son estas tres marcas las que mayor especialización tienen en la realización de pinturas al óleo de calidad.
Otros Materiales y Accesorios para pintar
Por último me gustaría hablarles un poquito sobre otros materiales y accesorios no menos necesarios para pintar como lo son los mismos óleos.

El Caballete: otra herramiente indispensable ¡Sí indispensable! para pintar es el caballete. Hago énfasis en que es indispensable porque me he encontrado con muchos aficionados e incluso con estudiantes de Artes que comienzan el oficio según un pensum de carrera universitaria, que prescinden del caballete e incluso lo aborrecen alegando que es "un artículo más bien esnobista" que sólo sirve para darse "pompa y cachet" y que sólo lo usan "aquellos que piensan que por tenerlo pueden emular a los pintores de épocas pasadas" otros me decían que "no es necesario, con colocar el lienzo en la pared con un par de chinchetas tengo" o peor aún, "yo prefiero tenderme en el suelo y pintar libremente" pues a todos aquellos que piensan de ese modo, con todo respeto, les digo ¡PERO CUÁN EQUIVOCADOS ESTÁN! El caballete es algo indispensable, no sólo porque te brinda mayor comodidad, orden y practicidad al pintar, sino, porque este utencilio está pensado para colocar el soporte a pintar en un ángulo de 45 grados, el cual es el ángulo necesario para tener una correcta percepción de la imagen a elaborar respecto a sus proporciones, además, existen varios tipos de caballetes según sean los propósitos del artista, sin embargo, podría dividirlos en tres tipos: Caballetes de taller, para formatos grandes o regulares que se elaboran preferiblemente en el estudio o taller del artista, los caballetes de mesa para elaborar obras de formatos pequeños y los caballetes de campo que son muy prácticos a la hora de salir a pintar al aire libre.
Hay otros accesorios para pintar que se deben tener en cuenta como es la paleta de pintor, godets, trapos, etc. pero también existen muchos otros materiales auxiliares que facilitan la tarea de pintar. (Les anexo el exclusivo catálogo de la talens sobre estos materiales auxiliares)
Y Como siempre aquí les dejo sendos libros para que comiencen de manera autodidacta el sublime oficio de pintar al óleo. ¡Qué lo disfruten!

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